La Nación Báltica está buscando daños, incluida la compensación por los costos de refuerzo fronterizo.
Lituania ha iniciado procedimientos legales contra Bielorrusia en la Corte Internacional de Justicia (ICI), acusando a su vecino de orquestar una crisis de refugiados y migrantes al facilitar el contrabando de personas a través de su frontera.
“El régimen bielorruso debe responsabilizarse legalmente por orquestar la ola de migración ilegal y las violaciones de los derechos humanos resultantes”, dijo el lunes el Ministro de Justicia Lituana Rimantas Mockus en un comunicado.
“Estamos llevando este caso a la Corte Internacional de Justicia para enviar un mensaje claro: ningún estado puede usar personas vulnerables como peones políticos sin enfrentar consecuencias según el derecho internacional”.
El caso, presentado a la CIJ en La Haya, se centra en presuntas violaciones de Bielorrusia del Protocolo de las Naciones Unidas contra el contrabando de migrantes por tierra, mar y aire.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Lituania dijo que los intentos de resolver el problema a través de las conversaciones bilaterales fracasaron y tiene evidencia que muestra una participación directa por parte del estado bielorruso en la organización de los flujos de refugiados y migrantes, incluido un aumento en los vuelos desde el Medio Oriente operado por las aerolíneas estatales bielorrusas.
Después de aterrizar en Bielorrusia, muchos de los pasajeros fueron escoltados a la frontera lituana por las fuerzas de seguridad bielorrusas y obligados a cruzar ilegalmente, dijeron funcionarios lituanos.
Lituania también acusó a Bielorrusia de negarse a cooperar con sus servicios fronterizos para prevenir cruces irregulares y dijo que está buscando una compensación a través de la CIJ por presuntos daños causados, incluidos los costos relacionados con el refuerzo fronterizo.
Las tensiones entre los dos países han cocinado desde 2021 cuando miles de personas, principalmente de Oriente Medio y África, comenzaron a llegar a las fronteras de Lituania, Polonia y Letonia desde Bielorrusia.
Bielorrusia había deportado previamente a refugiados y migrantes del Medio Oriente con más de 400 iraquíes repatriados a Bagdad en un vuelo chárter desde Minsk en noviembre de 2021.
Ese mismo año, un informe de Woran Rights Watch acusó a Bielorrusia de fabricar la crisis, descubriendo que “los relatos de violencia, el tratamiento y la coerción de degradación de los guardias fronterizos de Bielorrusia eran comunes”.
Funcionarios de la Unión Europea también han acusado a Minsk de la migración de “armas” en un esfuerzo por desestabilizar el bloque. Las afirmaciones son fuertemente negadas por Bielorrusia.
En diciembre, la UE aprobó las medidas de emergencia que permiten a los Estados miembros que limitan a Bielorrusia y Rusia suspender temporalmente los derechos de asilo en los casos en que se está manipulando la migración para fines políticos.