El pasado viernes se vivió otra jornada de protestas en contra del gobierno de Sebastián Piñera en Santiago de Chile, con 23 detenidos.
Los hechos ocurridos en la plaza de la dignidad, tenían por objeto representar la discriminación y vejaciones que sufren los jóvenes presos por el estallido social de octubre de 2019, que, en algunos casos, llevan más de un año de privación de libertad sin condena, con juicios amañados por los fiscales del Estado.
Asistentes y medios independientes acusaron que efectivos policiales detuvieron violentamente a manifestantes, golpes contra fotógrafos, y uso de caballos y perros para dispersar la protesta.